La artritis es un término general para denominar más de 100 padecimientos diferentes que afectan a las articulaciones y los tejidos circundantes. Cualquier articulación en el cuerpo podría ser afectada, pero las más comunes son las rodillas, caderas, manos y muñecas.
Por el Dr. Mercola
- Los investigadores evaluaron esqueletos de 6 000 años de antigüedad y encontraron que las personas nacidas después de 1940 tenían un riesgo 2.5 veces mayor de desarrollar OA, en comparación con las que habían nacido antes de 1940, incluso después de llevar un control de las diferencias en edad y peso
- Es posible que un factor relacionado con un estilo de vida sedentario cada vez más extendido disminuya la fuerza muscular y estabilidad articular; moverse más e incluir las grasas omega-3 en su alimentación podría disminuir su riesgo general
Las dos formas más comunes de artritis son la osteoartritis (OA) y la artritis reumatoide (RA). Ambas formas de la enfermedad causan un dolor y malestar significativo en las articulaciones, pero los factores desencadenantes de estas enfermedades son diferentes.
La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmunológica en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca por error las articulaciones a través de liberar enzimas que dañan el revestimiento. La enfermedad es crónica y progresiva, al causar inflamación que ocasiona una dolorosa deformidad e inmovilidad.
Usualmente, ocurre en los dedos, pulgares, muñecas, codos, hombros, rodillas, pies y tobillos. Además, la RA podría desencadenar otros síntomas sistémicos tales como la inflamación en los pulmones y ojos, nódulos debajo de la piel, fatiga, fiebre y pérdida de peso.
Alrededor de 1.5 millones de personas en los Estados Unidos padecen RA; casi tres veces más mujeres que hombres tienen la enfermedad. Por otro lado, más de 30 millones de adultos en los Estados Unidos padecen OA, que es la forma más común de artritis y a veces es llamada enfermedad degenerativa articular.
Por desgracia, los investigadores han encontrado que el número de personas que padecen OA ha aumentado y su riesgo de padecer la enfermedad podría ser mayor que la que sus abuelos experimentaron.
¿Qué es la Osteoartritis?
Muy comúnmente, OA afecta a las articulaciones que soportan el peso del cuerpo, tales como las rodillas, caderas, espalda baja, cuello y los huesos pequeños de las manos.
Las articulaciones que son afectadas con mayor frecuencia son las utilizadas repetidamente para realizar una tarea o hacer su deporte favorito. El exceso de peso podría afectar a sus caderas, rodillas, huesos de las manos y parte inferior de la espalda.
Las lesiones o el desgaste repetido en las articulaciones podrían causar que el cartílago de los huesos se desgaste, lo cual causaría una fricción ósea. Como resultado, es posible que pierda la flexibilidad articular, se desarrollen espolones óseos y experimente inflamación y dolor articular.
Las Grasas Omega-3 Podrían Ayudar a Prevenir la Osteoartritis
Otro factor en el desarrollo de cartílago dañado, que causa OA, es una deficiencia de grasas omega-3. Los modelos basados en animales que utilizan conejillos de indias con tendencia a la artritis, han demostrado que llevar una alimentación alta en grasas omega-3 no solo ayuda a prevenir la enfermedad, sino que también proporciona apoyo para reducir los síntomas en animales ya afectados por OA.
Hasta hace poco tiempo, los científicos no estaban seguros de por qué las grasas omega-3 eran tan beneficiosas y cómo trabajaban para reducir la inflamación. Un estudio reciente del Hospital Brigham y de la Mujer, en Boston, encontró que una vez que estas grasas eran consumidas, se convertían en compuestos 10 000 veces más poderosos, para disminuir la respuesta inflamatoria.
En las enfermedades de tipo inflamatorio, una respuesta inmunológica e hiperactiva produce la destrucción de tejidos. Esta investigación demostró que, efectivamente, los poderosos compuestos producidos gracias a las grasas omega-3 detienen este proceso activo.